Los monitores del sueño funcionan durante muchas horas, normalmente durante toda la noche, por lo que la calidad de la alimentación eléctrica es un factor crítico para el seguimiento preciso de las señales biológicas, la seguridad del dispositivo y la comodidad del usuario. Ya sea que se integren en dispositivos portátiles o en unidades de diagnóstico junto a la cama, las soluciones de alimentación eléctrica deben cumplir con normas eléctricas y de seguridad precisas.

Los requisitos típicos incluyen:

• Ondulación y ruido ultrabajos: para proteger la medición de señales biológicas sensibles y la precisión de los sensores.
• Salida de voltaje estable y silenciosa: para un funcionamiento ininterrumpido durante la noche.
• Bajo consumo en modo de espera: garantiza la eficiencia energética durante las horas de inactividad.
• Generación mínima de calor: evita molestias o sobrecalentamiento durante el sueño.
• Compatibilidad con enchufes de todo el mundo: apto para uso doméstico y clínico en todas las regiones.